- Esta época del año es un momento especial para nuestras residencias, donde los profesionales se preparan para que los niños y jóvenes tengan una amplia gama de actividades para disfrutar durante los meses de enero y febrero.
Talleres artísticos, paseos, convivencias y cursos, son algunas de las actividades que ambas residencias prepararon para los meses estivales, las que tienen dos pilares: continuar entregando conocimientos y generar instancias de participación y esparcimiento, con el fin de que los jóvenes sigan trabajando en su desarrollo personal.
Residencia de Cauquenes
Para sorprender a los más pequeños, los profesionales de Cauquenes organizaron un paseo a la playa. Fue una tarde donde profesionales y niños disfrutaron en el mar, haciendo castillos de arena, jugando un partido de fútbol y con una convivencia que les permitió recargar energías para continuar el día de diversión.
En Cauquenes, los niños y adolescentes eligen las actividades según sus intereses, a los adolescentes les gusta trabajar en la huerta del lugar, manteniendo las frutas y vegetales que cosechan ellos mismos. Esta labor, además de ser un espacio recreativo, está destinada a que comprendan de forma práctica la importancia de la disciplina, esfuerzo y constancia en los procesos.
El arte y la música también están presentes en las actividades de verano, a través de talleres de cerámica, pintura, dibujo y música, organizados y realizados por los mismos profesionales del lugar. En estos espacios los niños realizan creatividades sin límites, donde expresan emociones, sensaciones y deseos, transformándose en un proceso terapéutico para ellos.
Residencia de Los Ángeles
Los niños y jóvenes de esta residencia tienen una clara preferencia por los deportes, siendo uno de sus favoritos el fútbol; una actividad donde refuerzan el trabajo en equipo, liderazgo y superación.
Los profesionales de esta residencia también se han enfocado en generar instancias y rutinas para que los jóvenes continúen aprendiendo a través de capacitaciones y talleres para todas las edades, lo que permite entregarles nuevos conocimientos y motivaciones para su desarrollo.
Las vacaciones de verano están hechas a la medida de los más pequeños de nuestras residencias a través de la realización de talleres, actividades y cursos que posibilitan continuar con sus atenciones reparatorias desde un enfoque más lúdico.