En el marco de la discusión del proyecto de ley del sistema de garantías de los derechos de la niñez, la Comisión de Infancia del Senado aprobó esta semana la indicación al artículo 26, que establece el derecho de los niños a participar en manifestaciones públicas.
Preocupa que este reconocimiento tenga como consecuencia la posibilidad de exponerlos a vulneraciones de sus derechos y al riesgo cierto de ser instrumentalizados por adultos, en el contexto de manifestaciones que comienzan como pacíficas y acaban en violencia, exponiéndolos a consecuencias negativas en su desarrollo y formación, cuestiones de las que los últimos acontecimientos vividos en el país dan amplio testimonio.
La autoridad y tutela de los padres y adultos responsables en su caso, son imprescindibles para proporcionar a los niños y jóvenes un contexto de crecimiento sano y seguro, dándoles una perspectiva equilibrada de sus derechos, pero también de sus deberes para con la sociedad y sus semejantes. La participación en manifestaciones públicas, debiera contar siempre con la autorización de los adultos encargados de su cuidado y protección, quienes deberán aquilatar si ello se ajusta al bien superior del niño o joven y, en todo caso, deben asumir las responsabilidades subsecuentes que de ello se deriven.
Aún es tiempo de rectificar en las siguientes instancias de discusión de este tema, y por el bien de los niños que el proyecto dice proteger, ojalá así ocurra.
José Pedro Silva Prado
Presidente
Fundación Ciudad del Niño