- Es programa de prevención, cuyo propósito es fortalecer las habilidades parentales y la interacción entre padres e hijos, con la finalidad de evitar situaciones que vulneren los derechos de los niños y niñas. Se aplica desde los años 70 en Estados Unidos y otros 20 países, incluidos países de habla hispana.
PCIT ofrece atenciones presenciales a niños y niñas de entre 2 años y medio y 7 años, que presentan conductas que son percibidas como conductas problema por sus padres/adultos responsables, como: desobediencia, hiperactividad, ansiedad de separación, agresiones físicas hacia otros niños o adultos y «pataletas».
Las 20 familias que llegaron a este programa de prevención, “reconocen la necesidad de ayuda en lo referente a las habilidades parentales o bien consideran que su hijo presenta conductas problemáticas” sostiene Ana María Salinas, Directora del programa.
Por otra parte, una de las mayores preocupaciones de los padres al momento de ingresar a PCIT dice relación con la expectativa que tienen de recibir la ayuda apropiada para aprender a relacionarse con sus hijos y a desarrollar habilidades que les permitan manejar mejor las conductas que ellos evalúan como difíciles y problemáticas.
El Programa Preventivo de Terapia de Interacción Padre Hijo se realiza de forma presencial en la ciudad de Santiago. Las instalaciones cuentan con espacios creados especialmente para generar interacción entre los padres y niños a través del juego, con retroalimentación inmediata por parte del equipo de profesionales, que se adapta a cada situación familiar. Es una terapia breve, enfocada en mejorar la relación de apego entre cuidadores e hijos/as, aumentar las habilidades sociales y cooperación infantil y disminuir las conductas problemáticas infantiles.
Situaciones que aborda la terapia:
- Desobediencia
- Agresiones verbales
- Agresiones físicas
- Problemas de conducta en clase
- Hiperactividad
- Quejas y llantos
- Baja autoestima
- Ansiedad de separación
- Mal humor
Resultados esperados:
- Mejora de las relaciones de apego entre adultos responsables/cuidadores y niños/as.
- Desarrollo de habilidades parentales en adultos responsables/cuidadores.
- Aumento de las habilidades socioemocionales y la cooperación infantil.
- Disminución de las conductas problemáticas infantiles.
Una vez que se cumpla el ciclo de trabajo con las primeras familias participantes en el programa, se ampliará la convocatoria para que más familias puedan acceder a esta terapia.
El equipo está formado por su directora y terapeuta, Ana María Salinas, psicóloga, con especialidad en psicología clínica, psicodiagnóstico, trabajo con víctimas, psicología jurídica y forense, docencia e investigación; tres profesionales psicólogas/terapeutas, con formación en psicología clínica y amplia experiencia trabajando con niños, niñas y adolescentes vulnerables y con vivencias de victimización; y un asistente.